16.12.06

Canción autóctona del norte chileno (nunca supe el nombre)

Tendría apróximadamente once años y jugaba con una niña iquiqueña, morena, de pelo negro y de mi edad. Era prima de una amiga que vivía en el pasaje de al lado y venía de vacaciones. Recuerdo que a todos los niñitos del sector nos gustaba, pero ninguno le diría, porque nadie sabía como hacerlo. Ya en esos años esbozaba planes malévolos de seducción femenina que-al igual que en la actualidad- no resultaban, pero me brindaban bastante diversión. En esa ocasión, mi plan estaba esquematizado en dos pasos: El primero consistía en seguirla a todos lados y el segundo en pensar un plan decente. Nunca pasé de la primera etapa, besé a la niña o la volví a ver después de ese verano, pero en las horas con ella aprendí una canción que se perdió en mi memoria por años y que rememoré hace unas semanas, mientras esperaba la micro para volver a casa. La canción no tiene futuro y supongo que en unos meses la volveré a perder, pero merece un espacio en el blog que nadie lee, porque constituye uno de los grandes hits de mi infancia y me causa gracia.

A la orilla del mar
chiqui-bum, chiqui-bum
me puse a cagar
chiqui-bum, chiqui-bum
le dije a Manuel
chiqui-bum, chiqui-bum
que me trajera papel
chiqui-bum, chiqui-bum
el muy rehueón
chiqui-bum, chiqui-bum
me trajo cartón
chiqui-bum, chiqui-bum
y por maricón
chiqui-bum, chiqui-bum
le tiré un mojón
chiqui-bum, chiqui bum

2 comments:

Alex Drams said...

Agradezco el reconocimiento a mi intento de rescatar nuestra cultura

=)

Anonymous said...

Mi papá me enseñó la misma canción cuando era pequeña y ahora yo con 35 años se la enseño a mi hija de 4 años y nos reímos mucho